Desde pequeña siempre al
acostarme mi papa solía leerme los cuentos de los hermanos Grimm historias que
para mi eran llenas de una fantasía que fue tomando fuerza en mi vida, mi papá
siempre me hacia la protagonista de cada cuento y mientras el iba narrando la
historia yo derrama lagrimas o reía a carcajadas con esa inocencia que
caracteriza a los niños, un día mi papá se invento una historia que aun no
olvido era la historia de dos hermanitos y estos tenían el nombre de mi hermano
y el mío en el cuento uno de los chicos moría, yo derrame lagrimas por días
pensando en que ese niño era mi hermano y que había muerto, mi padre me vio
llorar y supongo que sintió pesar y me dijo “ha ese cuento tu le puedes cambiar
el final por que la fuerza de escribir es eso, plasmar lo que uno desee en una
hoja, deja de llorar ve y coge un papel e inventa un final feliz para esos
chicos”.
Y eso fue exactamente lo que
hice plasme en hojas aquella historia y le pude dar un final que para mí fue
agradable quise que fueran encontrados por sus padres y que el malvado que los
había raptado fuera castigado por ello, ese día dormí feliz y pensé que en
algún lugar del mundo esos chicos me estaban agradeciendo, entonces comencé
amar escribir porque era lo único con que podía cambiar el mundo o inventarme
uno nuevo uno que a mí me gustara. Nunca fueron de mi agrado los finales de los
cuentos que mi papá me contaba es más me atrevo a decir que por lo general
siempre quiero cambiar algo del final de algún libro que leo o de alguna
película que veo, mi hermano siempre que terminamos de ver una película me dice
“stefanny y como hubiera sido el final feliz para ti” entonces yo le cuento mi
final y sé que él es el único que lo va a escuchar aunque sea para reírse me
hace sentir bien porque de alguna manera siempre espera que yo le cuente mi
final.
Un día compre una libreta y
empecé a escribir cada final de todos los cuentos que mi padre me había leído y
comencé a cambiarlos confieso que sentía poder, me sentí grande al poder darle
vuelta a una historia y finalizarla tal cual yo quería, en esa libreta empecé a
escribir acontecimiento de mi vida pero siempre cambiando algo o mejorando algo
que había pasado si en algún momento me solía pasar algo malo en mi libreta
simplemente yo lo reacomodaba y cambiaba por algo bueno. Cuando tenía 9 años y
estaba en 5 de primaria mi tío murió eso fue algo que marco mi vida y que
siempre quería borrar como lo extrañaba tanto se me ocurrió darle un final
feliz a ese pedazo de mi vida y así en mi libreta el simplemente se fue de
viaje.
Yo soy fanática a Peter Pan
y simplemente en mi libreta envié a mi tío a vivir al país de nunca jamás,
Lo imagine protagonista de
miles de aventuras de Peter y empecé a plasmarlas en un libro donde lo uní a
los niños perdidos, lo hice defenderse del temeroso capitán garfio y salvar a
Peter de sus garras, el pudo conocer a Wendy, Michael y John les enseño él nunca jamás y compartió
aventuras con ellos así como también los llevo de regreso a Londres y como
olvidar a campanita quien se hizo una amiga fiel de mi tío, Por mi parte me
sentía mucho mejor y sé que esto me ayudo a tomar las cosas con más calma Un
día hice parte de aquellas historias y fui raptada por el capitán garfio y
salvada por los niños perdidos, mi tío y Peter. Después de escribir eso
descubrí que ya era hora de dejar ser feliz a mi tío así que fui regresada
hasta mi casa y me despedí de mi tío con un enorme abrazo y los hice regresar
al país de nunca jamás, ese día cerré ese cuaderno y hasta hoy lo vine abrir,
confieso que reí a carcajadas leyendo todas las cosas que se me ocurrían.
Compre
otra libreta y emperece a escribir poemas, mi papa cuando joven declamaba
poesía y aun suele escribir poemas yo quise tomar eso del así que comencé a
escribir poemas acerca de las personas de mi familia y a veces en las reuniones
familiares solía leerlos o mi papá los declamaba, fue poco lo que me duro eso
comencé aburrirme y a pensar en mis cuentos y en mis finales felices, a veces
solamente escribía sobre algo que había sucedido en el país y de alguna manera
daba mi opinión y note la fuerza que tenia la manera de pensar de las personas yo
me fijaba en que lo que escribiera sonara bonito y ahora que leo muchas cosas
que escribí se que cometí muchos errores pero hoy puedo corregirlos y aprender
de ellos.
En
el colegio el primer libro que leí fue el coronel no tiene quien le escriba de
Gabriel García Márquez estando en 6 de bachillerato recuerdo que todos mis
compañeros se quejaban de aquel libro pero yo entre mas leía mas me aferraba a
ese libro, analice miles de veces el final pero me agrado esa manera de
finalizar y solo decir Mierda una palabra que significaba tanto en el libro
pero que mis compañeros no lograron entender y mi profesora de español
criticaba porque según ella no era una palabra adecuada para poner en un libro
yo critique muchas veces su manera de pensar, a lo que ella respondía que me
faltaba mucho por aprender. Y eso empecé a hacer a aprender me leí la biografía
de Gabo miles de veces y comencé a sentir cierta admiración por él, por mi
cuenta propia leí 100 años de soledad aquella novela que pensé que sería
maravillosa ya que le había hecho ganar un premio nobel.
Fue
difícil entender aquella historia que a veces se me torno aburrida y que de
alguna manera no fue agradable leer, a veces pienso que no era el momento de
leerlo me sentí desilusionada de sí misma y comencé a pensar lo difícil que
sería leer algún otro libro de Gabriel así que me cerré a la idea de querer
conocer más sobre el mundo de García Márquez, pero conocí a una profesora de la
cual aprendí muchas cosas, ella me enseño que la escritura era un soporte y que
con ella podía ser yo misma, ella me abrió a un mundo literario, leí muchos
libros y cuentos de Márquez y aunque conocí otros autores y libros siempre me
encamine a los de Gabo por que cuando los leo siento que hago parte de ese
mundo, puedo decir que Gabo es mi escritor favorito y aunque mucha gente me
critica y dice que hay miles de escritores internacionales mucho mejores que el
yo pienso que él tiene un toque mágico que envuelve al lector y lo que más me
identifica con él es que muchos de los personajes de sus novelas son vasados en
personas de su familia y muchas veces yo hacía lo mismo cuando me creía
escritora.
En
el colegio aprendí a hacer ensayos, el primero que hice fue sobre Edipo rey, me
agradaba mucho escribir ensayos porque de alguna manera era mi opinión, siempre
me saque buenos resultados en lengua castellana y en el colegio fue muy buena
escribiendo reseñas, crónicas o simplemente escribiendo, pero nunca ningún
profesor me manifestó que fuera escritora y nunca estuvo en mis pensamientos,
un día me dijeron que mis palabras tenían fuerza y que si yo le prestaba
atención a eso quizá algún día podría hacer algo productivo con eso, pero para
mí simplemente lo que yo escribía era algo que sonaba bonito.
Cuando
decidí entrar a la universidad tenía como opción comunicación social,
publicidad y literatura, me costaba decidir entre las 3 pues quería
comunicación social pero encaminarme más al periodismo, me gustaba publicidad
pero esta solo había en universidades privadas, y literatura era mi última opción,
yo quiero ser periodista de redacción, quiero opinar en los periódicos o en las
revistas sobre futbol o sobre algún acontecimiento, quiero mostrar mi manera de
pensar al mundo. Yo quería aprender a escribir y por ello decidí entrar a
literatura una carrera donde estaba segura que me enseñarían eso y si, ahora
que leo mis historias me doy cuenta que solo me preocupaba por que sonaran
bonito y eso era una gran equivocación pero en estos largos meses de estar en
la universidad aprendí que más que eso mis escritos tendrían que tener sentido.
Me
tope con escribir sobre temas de los que jamás había pensado y se que cuando
escribí ese texto de creó en lo que creo lo hice tal cual hacia mis textos del
colegio, cuando lo leí sonó bonito y simplemente pensé que me iba sacar buena
nota, pero al encontrarme con todas esas correcciones y con ese montón de
errores descubrí que eso era lo que me enseñaban en el colegio a escribir una
carreta que simplemente sonara bonito y si nunca me había preocupado por darle
sentido a lo que escribía sabia que ahora me iba a costar mucho trabajo y
entendí que después de estudiar 11 años en un colegio apenas estaba aprendiendo
a escribir, sentí que perdí mucho tiempo me pareció hasta absurdo tener que
estudiar en un colegio por años para luego ver que es poco lo que te sirve eso
en la vida.
Leer
ahora lo que escribo me hace pensar que si valió la pena entrar a la
universidad y aunque se que no soy la mejor escribiendo, si sé que he mejorado
mucho, que ahora doy sentido a mis textos, que ahora escribo cosas más
coherentes, que me fijo más en la puntuación y aunque a veces pienso que esto
no es lo mío pienso que todavía me queda mucho camino y que tengo bastante
tiempo para seguir aprendiendo. Muchos piensan que escribir es solo coger un
lápiz y un papel y llenarlo de letras y palabras pero yo aprendí que escribir
es mucho más que eso, es plasmar tu manera de ver muchas cosas pero dándole
forma a un texto que simplemente cuando alguien lea lo que escribiste tú
sientas que entendió lo que quieres decir.
Sé
que por mi parte no quiero ser escritora jamás me veo haciendo eso y sé que
jamás escribiría un libro entero, yo sigo con mi idea de escribir textos de
opinión que hagan parte de artículos de una revista no sueño ser reconocida si
no que alguno de mis textos algún día sea reconocido, no me veo siendo
profesora y detesto cuando alguien me pregunta sobre mi carrera y de alguna manera
lo relaciona con ese campo, Siendo sincera odiaría ser profesora pues ponerme
en los pantalones de miles de mis profesores a los que muchas veces tome de
recocha y que siempre fueron motivo de risa para mí y para mis compañeros no me
gustaría para nada ser ellos y veo muy lejana esa posibilidad en mi vida pues
no estoy preparada para hacer el ridículo porque eso fue lo que una vez dijo
cierto profesor de mi universidad “ si uno es profesor debe prepararse para
hacer el ridículo toda la vida”
Yo
simplemente quiero aprender a escribir y estoy en esta carrera por esto pero
sigo con mi ideal de estudiar comunicación social y sé que todo lo que me han
enseñado en esta carrera sobre escribir me servirá, quizá me agrade mas esta
carrera y decida quedarme aquí, quizá inicie comunicación social y deje en el
olvido esta carrera o quizá las termine ambas pero sé que en las dos seguiré
amando escribir y viendo placentero plasmar mi opinión y que otro la lea, se
que de alguna manera lo que escoja en mi vida vendrá conectado con la escritura
y sea como sea la fuerza de escribir es eso conectar tu vida con la escritura,
con las palabras con las letras. Hoy escribo para divertirme o para cumplir en
mi universidad pero espero en un mañana escribir para sostenerme para ser
alguien, quiero que un día alguien recuerde lo que yo escribo y al leerlo se
sienta identificado, yo no quiero dejar mis escritos en el olvido, yo quiero
escribir y recibir críticas, quiero causar polémica con lo que diga, yo quiero
opinar sobre lo que me gusta y lo que no y para eso quiero aprender a escribir.
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